LOS MEJORES BARES DE MIRAFLORES (PARTE 1)

Desde hace algún tiempo vengo visitando los distintos bares de Lima (Centro de Lima, Miraflores, Barranco, Pueblo Libre y San Isidro), desde los top que aparecen en las críticas de las revistas extranjeras, hasta aquellas que sólo son conocidos por unos cuantos comensales al paso. Mi intención es descubrir cuáles son las mejores barras de la ciudad, pero sobretodo, con cuál cada persona puede identificarse. En esta oportunidad, comentaré respecto a las Mejores Bares de Miraflores (Parte 1). ¿Qué debe tener una barra para ser la mejor? Varios son los factores. Primero, un buen ambiente. El mejor. Me refiero, no sólo a la estética del lugar, sino también a la música y, sobretodo, a las personas que hacen noche tras noche que un lugar sea especial más allá de la decoración. Segundo, la variedad de tragos; y en caso de no tenerla, ser el mejor en los pocos tragos que ofrezca dar. Tercero, la infaltable proporción entre el precio y el beneficio recibido por tal. Existen bares muy caros, pero no compensan lo que cuestan con los productos y/o el servicio ofrecido. Cuarto, la calidad de comida, es decir, de los piqueos. En una buena carta es imposible que falten piqueos, pues en ellos está la combinación perfecta para seguir tomando.  

La primera “parada” sobre la que escribiré, como ya adelanté, es Miraflores.  Y de hecho, todavía vendrán más artículos sobre este destino, pues no alcanza un solo artículo para poner el nombre y descripción de los bares que hemos visitado. (Específicamente escribiré hasta tres artículos al respecto). La razón principal para empezar por Miraflores es que muchos desconocen de la amplia vida nocturna del distrito, la misma que inclusive, es superior a la de su vecino Barranco. De esta manera, la night life del distrito se divide hasta en seis sectores. El primero de ellos, es Larcomar, el centro comercial bajo el Parque Salazar, al final de la Avenida Larco. El segundo de ellos, esta ubicado en el Pasaje “El Suche” y alrededores. (Mucho más privado que el boom del centro comercial ubicado en el Malecón). Los otros cuatro, y donde encontramos la mayor variedad, se ubican alrededor de los Parques Central y Kennedy. Así, el tercero es el sector más concurrido de todos, pero no por ello el mejor. Sus bajos precios y sus servicios destinados a colmar las expectativas del limeño común (cerveza y salsa), lo hacen tan concurrido. Me refiero al sector del Pasaje San Ramón (más conocido como Calle de las Pizzas) y la Calle Berlín. El cuarto, y en contraposición del anterior, esta conformado por los bares y discotecas más “pitucas” del centro del distrito; donde el rock y el chill out se imponen a la salsa. Se encuentra ubicado detrás de las instalaciones del antiguo Colegio Champagnat (hoy Universidad de Piura), a lo largo de la Calle Francisco de Paula Camino. El quinto, consta de los bares ubicados en la Calle Bonilla y paralelas, más destinados para jóvenes que practican un estilo de vida cercano al hipster latinoamericano (indies y trovadictos). Finalmente, el sexto, esta conformado por los bares de mala muerte del distrito, típicos de borrachos empedernidos, ubicados en la Calle Porta, cerca del Teatro Julieta. También existen otros bares y/o discotecas más que interesantes que no se ubican en estos seis sectores señalados. Pero son mínimos. Digamos que son la excepción que confirma la regla (Un ejemplo de ello es la Discoteca Nébula, nueva capital de los rockeros de la zona después de la desaparición del Bauhaus, ubicada en la zona de la antigua Casa Hacienda Marsano, al final de la Avenida Arequipa). Sin más preámbulos, empecemos con el primer listado de bares referidos al distrito de Miraflores:

El Chelín

Ubicada en la zona de Bonilla, el Chelín existe desde el año 2000. (Siendo, con la desaparición del Medieval, el local de mayor antigüedad en el área). Debo confesar, que en mi época de universitario, el Chelín fue mi bar favorito de todo el distrito (Sí mamá, yo también fui hipster). Pequeño, con cómodas sillas y sofás, el local posee un estilo abandonado como una taberna subterránea del siglo pasado en Liverpool. Sus muros poseen una decoración con papel periódico, cajas de cerveza en los techos, y un graffiti de elefante budista en la única pista de baile ovalada que haya conocido. (Y es que, originalmente, la idea de su dueño era que en ella se presentaran grupos en vivo). Su mejor ambiente es, sin dudas, el sofá ubicado sobre un altillo, junto a la imagen de Anakin Skywalker. Justamente, por ser pequeño, su mayor problema es la facilidad con la que se llena, e incluso, tiende a “reventar”. (Aunque, para ser sinceros, la alta competencia en la zona, ha hecho que el Chelín vea reducida su clientela). Su día más repleto son los viernes, en que se aprecia a un público “oficinista”, disfrutando de un merecido after office). Para evitar ingresar a un lugar lleno, se recomienda ir un día sábado, o incluso, llegar temprano, pues el Chelín esta abierto de martes a domingo desde las 6 pm. Su lista de tragos no es tan variada como esperaría (en gran medida porque la mayoría de su público es chelero y/o pisquero). No tienen piqueos. (Su único plato de tequeños no cuenta). Una solución a ello, es pedir que los mozos te traigan un emparedado del venerado Sanguchón Campesino, ubicado en la misma calle, un par de cuadras en dirección a la Vía Expresa. La música es variada, pero siempre muy clásica en cada estilo. Si pasan rock, ponen AC/DC. Si ponen salsa, es Rubén Blades. ¿Lo mejor de la discoteca? El buen Rosario. Rosario es el barman del Chelin, y quién al mejor estilo de sus mejores colegas, esta siempre apto para entablar conversación contigo, recomendarte sus mejores preparaciones, e incluso, darte un consejo de amigo. Su especialidad son los tragos a base de Baileys, siendo el mejor el denominado “Baileys Colado” (Que no es otra cosa que Piña Colada más la popular crema irlandesa). Este trago no figura en la carta, y sólo lo prepara a pedido del cliente. De los que figuran en carta, recomiendo el Orgasmo (también a base de Baileys) y el Cucaracha (trago originalmente mexicano a base de Tequila, y flameado como corresponde). Rosario también funge del DJ de la discoteca, así que puedes pedirle alguna que otra canción. Si la tiene, no dudes que la pondrá. El Chelín, todo un clásico moderno del distrito. Calificación: 5/10

Treff Pub Alemán

El Treff esta ubicado en el Centro Comercial “Los Duendes” de la Avenida Benavides, muy cerca del Suche. Existe desde 1933 y es un punto obligado para quienes disfrutan la onda de los pubs; es decir, un lugar donde poder tomar en cantidad, conversar, escuchar buen rock y ponerte a jugar con los amigos. Es el mejor pub estilo europeo en Miraflores (Hace algunos años atrás, hubiera competido con el fenecido Murphy´s Irish Pub de la Calle Shell). Lo que más llama su atención es, como la mayoría de locales ubicados en este sector del distrito, lo oculto que está a la vista. Pero que, justamente, lo convierte en un sitio “sólo para conocedores”. Sitio ideal para tomar cerveza alemana, jugar billar o dardos, y deleitarte con una buena dosis de rock británico de los ochenta y noventa (inclusive la banda de rock inglesa Placebo visitó sus instalaciones la vez que tocaron en Lima). Su carta posee variedad de tragos y piqueos, incluyendo una sección donde podrás encontrar los de origen alemán. Si un contra posee es que se demoran mucho en prepararte los tragos, y tienes que esperar aun mas, si has pedido algún piqueo. Sin dudas, lugar ideal para ir a celebrar el Oktober Fest a fines de octubre. Calificación 6/10

El Pollo Pier

Hoy conocido como Chicken´s Pier, es uno de los bares de mala muerte más famosos del distrito, y como era de esperarse, está ubicado en la Calle Porta. La calle Porta y la Calle Los Pinos conforman el underground de Miraflores. No en vano, fue en Los Pinos donde se empezó con la piratería de discos de rock británico en la ciudad. Incluso, actualmente, es la zona de desplazamiento de otras “manchas” de estilo subterráneo como son los actores y actrices independientes del Teatro Julieta, la comunidad gay que ingresa a divertirse a la discoteca Downtown, y por supuesto, los borrachos misios que frecuentan los bares de la zona. El Pollo Pier funciona en un antiguo ranchito de Porta, a pocos metros de la quinta donde vivieron Mario Vargas Llosa y la Tía Julia. En sus inicios, funcionó como un restaurante de pollos a la brasa; sin embargo, descubrió que mas réditos daba convertirse en un chupódromo. Lugar de iniciación chelera para muchos, especialmente para el antiguo alumnado del Colegio Champagnat, que encontraba en el Pier el lugar perfecta para chupar a la salida del colegio sin que se lo prohibiesen. Recuerdo que cuando era colegial, disfrutaba mucho ir al Pier. Cada salón de la promoción solía separar un cuarto de la vieja casa, y la única manera de ingresar ahí era mediante una contraseña. Incluso, hasta hoy, exalumnos del Champagnat hacen su reunión en el ya mítico Pollo Pier. (Salvaguardando las distancias, “La Catedral” de Vargas Llosa en Miraflores). Su especialidad es el chicharrón de pollo con cerveza. Lo especial de este plato, es el sabor a limón del pollo, el cual le da un toque único. Justamente, cuando mi enamorada prepara chicharon de pollo en casa, le pido que lo haga al estilo Pier, es decir, con limón. No obstante, la calidad del mismo no llega para considerarlo el mejor del distrito, y mucho menos, de Lima. (Dicho título se lo lleva el “Munich” del Centro de Lima, del cual ya hablaremos cuando toque hablar de los Mejores Bares del Centro). La música del local es salsa y rock en español. Actualmente, el Pollo Pier vive una época de cambios (otros dirían de decadencia). Hoy en día el viejo ranchito se divide en dos instalaciones: La primera, el Pollo Pier I (denominado también Chicken´s Pier); y la segunda, el Pollo Pier II. Este cambio, lejos de mejorar el servicio, lo ha empeorado. No obstante, sigue siendo un sitio correcto para agarrarse a botellazos en una reunión caleta. No le pidan más. Calificación 2/10

Próximos comentarios en Los Mejores Bares de Miraflores (Parte 2): Bar Huaringas, Discoteca Nébula, Los Altos de San Ramón y Expreso Oriente Restobar.